Hoy compartimos con vosotros un texto del investigador, bibliófilo y documentalista Rafael Solaz en el que nos desvela la historia de una rara felicitación navideña de 1868, las antiguas felicitaciones de Navidad en Valencia y la imprenta Juan Guix.
Un extrañísimo impreso salido de los talleres de Juan Guix sirve de excusa para hablar de las antiguas felicitaciones de Navidad en Valencia y también de esta popular imprenta.
Son bastante comunes las felicitaciones de Navidad y Año Nuevo de los diferentes oficios que, casa por casa, eran repartidas solicitando las estrenas, el aguinaldo. Fueron muy habituales a finales del siglo XIX y principios del XX impresas a todo color con dibujos alusivos de las fiestas navideñas o representando la figura del colectivo peticionario. Son comunes porque se imprimían cientos de ellas que eran repartidas por toda la ciudad, especialmente la de los años 30 al 60 del siglo XX.
Las que no son tan frecuentes son las editadas como impresos en blanco y negro, salidas a partir de la mitad del siglo XIX. En el archivo del Senado del Museo de la Imprenta se atesoran algunas pocas, todas impresas por una o dos caras. Pero jamás se había visto una como esta total rareza, muy primitiva [1868], ya que no viene referenciada en ningún catálogo oficial ni colección privada que se sepa.
Este folleto consta de 8 páginas, de tamaño octavo, y los carteros de Valencia la presentaron como una obra de zarzuela, con versos alusivos, música y estribillos: ¡Aquí está el pobre cartero/ que no tiene ni un real/ y que quiere tener muchos/ en Pascuas de Navidad.
Los Carteros a sus Parroquianos. Pout-purri de aires pedigüeños. Ese es el título del impreso efímero salido de la imprenta de Juan Guix. En 1855, el impresor Guix trabajaba en los talleres del diario El Valenciano. En 1862 ya editaba El Tío Nelo, un periódico satírico y burlesco que imprimía Ayoldi.
Sobre 1865, Juan Guix instaló una pequeña prensa de madera en su casa de la plaza del Almudín, número 14, piso segundo, con escaso material tipográfico, según cita Serrano Morales. Sobre 1868 Guix se traslada a un bajo situado en la plaza de la Almoina, núm. 1, dato que sirve para asegurar que esta rara felicitación sería de los primeros salidos del nuevo taller.
Guix siempre se dedicó al cuidado de todo lo que imprimía, se ocupó personalmente de ver y corregir sus ediciones, ya que en sus primeros años no tuvo corrector de imprenta ni tampoco un encargado gerente del taller.
Esta popular imprenta se mantuvo hasta principios del siglo XX. De sus talleres salieron muchos trabajos en valenciano o de carácter valencianista, obras de teatro y algunos periódicos festivos y satíricos. En la biblioteca del Museo de la Imprenta están referenciados un centenar de impresos con el pie de la imprenta Guix, con autores como Bernat y Baldoví, Juan Bautista Perales, Escalante, Palanca, etc.
Muchas gracias a Rafael Solaz por compartir con nosotros este descubrimiento bibliófilo, siempre es un placer contar con su colaboración.