La ilustradora Eva Vázquez es la primera protagonista de nuestro calendario solidario de 2021. Ella es la encargada de ilustrar el mes de enero, con su obra «El final del camino», que se utilizó como portada del libro «El final del camino», de Manuel López Gallego, (Editorial Edebé, 2019).
Eva Vázquez, entre la arquitectura y la ilustración
Eva Vázquez estudió Arquitectura y Animación, dos pasiones que ha conseguido unir a lo largo de su carrera. De hecho, Eva comenzó su andadura en el sector de la ilustración como autora de escenarios y paisajes para series y películas de animación.
Eva reconoce que dibuja desde niña: “No recuerdo bien, pero estaba siempre dibujando. Nada de dibujar en los libros ni en las mesa, que yo era una niña muy buena. Me encantaba usar los lápices de colores, era lo mejor del mundo… Escoger los colores, qué divertido. Aunque sigo sin saber usar el lápiz al que llamábamos de color carne”.
La técnica de Eva Vázquez es fundamentalmente digital. Por eso, para ella la hoja en blanco es la pantalla del monitor.
Cuando comienza un nuevo proyecto, lo primero que hace es ajustar las medidas y trasladar el boceto que ha hecho previamente en una ficha: “Son bocetos rápidos a bolígrafo, indico las ideas y dónde van las cosas, escribo mucho, sobre todo escribo lo que hay que poner, el color, qué tonos, el concepto… Y, rápidamente, lo traslado a la pantalla del ordenador, porque como lo deje estar un día en reposo o unas horas, luego no lo entiendo; no entiendo ese gurruño y seguramente no me parezca tan buena idea y quiera volver a empezar. Eso es fatal, puedo entrar en un bucle infinito”, nos confiesa la ilustradora.
Como estudiante de Arquitectura y con unos inicios marcados por la creación de fondos para dibujos animados, Eva estaba más habituada a dibujar objetos, edificios y paisajes que personajes.
Por eso los seres vivos se le resistían un poco y fueron llegando paulatinamente a su obra. “Invento fórmulas para representarlos y hago una pequeña biblia antes de cada proyecto, es la manera de que entren sin problema en mi mundo”, afirma Eva.
Sobre lo más raro o extraño que le han encargado dibujar, Eva nos comenta que una vez le encargaron una portada para un libro. Como el texto aún estaba en proceso, querían que eligiera entre dibujar un conejo con gafas o un ángel tocando una trompeta. “Sigo sin saber de qué iba el libro, pero estaba muy intrigada”, nos cuenta, divertida.
Eva nos habla también sobre la ilustración como complemento de artículos sobre temas más serios o complicados. “En EE.UU. colaboro desde hace muchos años con una revista de Derecho y hago la ilustración en la sección de delito penal, donde siempre alguien muere o queda gravemente herido de por vida.
Muchas veces a los ilustradores nos encargan ese trabajo porque introducir una foto es muy agresivo y violento. Se trata de casos de muerte, pero también de incesto, resiliencia, eutanasia, enfermedades graves o situaciones políticas complejas.
En este caso, mi trabajo es realizar el escenario de una manera lo más neutra posible, pero también realista. Tengo una carpeta llena de escenarios de desastres, pero sin personajes, no quieren personajes. Solo el escenario”.
Las recomendaciones e influencias de Eva Vázquez
Eva Vázquez no es de las que utiliza música para concentrarse y trabajar mejor, reconoce que le afecta demasiado; así que trabaja en silencio y “sólo en la etapa final del proceso pongo algo en Spotify, ahora mismo suena Jan Jelinek, antes estaba Susumu Yokota”.
Sobre sus influencias literarias, Eva nos reconoce su querencia por Neil Gaiman: “Yo empecé a dibujar por su culpa. Me dedico a la ilustración porque un amigo de mi hermana me prestó los cuatro primeros números de «Sandman» y me explotó la cabeza.
Me afectó tanto que todos los proyectos de ese año en Arquitectura tenían que ver con «Sandman» y su universo. Ahí empecé a leer cómics y a pensar en dedicarme a dibujar de verdad, cosa que hice luego estudiando Animación”.
Si nos tiene que recomendar una peli, Eva nos regala sus tres favoritas: «Milagro en Milán», «Extraños en el paraíso» y «Alien». “Todos los años pongo un árbol de Navidad en casa con muñecos de la saga Alien que me regala mi amigo José María Méndez y me trae de EE.UU.”.
En cuanto a libros, nos recomienda cualquier comic de Olivier Schrauwen.
Y si tiene que elegir un artista con quien irse de juerga, Eva elige a Javier Olivares y Joaquín López Cruces, “ambos súper vivos y súper divertidos, por favor qué bien bailan y qué graciosos son. Una risa continua. No solo son unos ilustradores y autores de cómic maravillosos, es que además el mundo es mejor cuando estoy con ellos, siempre con ellos”.
El sector de la ilustración para Eva Vázquez
Eva reconoce que el trabajo de ilustrador comienza a ser más respetado, aunque aún queda mucho camino por recorrer. “Un periodista me dijo una vez que le molestaba que le quitaran espacio en una página de prensa para introducir un “dibujito”, esta es la tónica habitual. A veces al escritor le dan una semana para escribir dos páginas y a ti media tarde para hacer el dibujo que le acompaña, en fin. No lo valoran igual ni de lejos, pero cada vez más. Eso sí”, nos cuenta la ilustradora.
Para mejorar la situación Eva propone concienciar a la gente de que el trabajo de uno vale y lleva muchas horas de estudio y realización, que hay muchas horas ahí metidas pensando: “Pero es que es agotador hacer eso, es agotador tener que mostrar esta evidencia a gente adulta”.
Y, ¿qué consejo le hubiera gustado recibir cuando empezó en el mundo de la ilustración?
“Relax… Relax porque esto es duro de narices y vas a estar cambiando de criterio continuamente y aprendiendo continuamente, pero sobre todo va mucho de pensar, de modo que tranquila”.
Muchas gracias a Eva por colaborar con nosotros en la realización de este calendario solidario, cuyos beneficios irán a parar a la Fundación Ronald McDonald de Valencia. Os recordamos que podéis comprarlo aquí.