El Museo Thyssen estrena el próximo 11 de octubre la que, sin duda, será una de las exposiciones más visitadas de la temporada: Picasso / Chanel, una muestra que explora la relación entre estos dos grandes creadores.
Picasso / Chanel: dos estrellas de la creación
El Museo Nacional Thyssen-Bornemisza inaugura el día 11 de octubre una exposición que explora la relación de dos grandes creadores del siglo XX: Pablo Picasso y Gabrielle Chanel, reuniendo arte y moda en un nuevo proyecto expositivo.
Picasso y Chanel colaboraron profesionalmente en dos ocasiones, ambas con Jean Cocteau: en Antígona y en el ballet de Serguéi Diághilev El tren azul. Se habían conocido en la primavera de 1917, seguramente a través del propio Cocteau o de Misia Sert. La diseñadora entabló con ambos una duradera amistad, que la introduciría en el círculo del pintor español y otros artistas.
La exposición está comisariada por Paula Luengo, conservadora y responsable del Área de Exposiciones del museo y reúne una excepcional selección de vestidos, óleos, dibujos y otras piezas procedentes de museos y colecciones americanos y europeos; entre los que destacan Almine y Bernard Ruiz-Picasso, Patrimoine de CHANEL y el Musée National Picasso de París.
Una exposición que explora la relación entra Picasso y Chanel
La muestra se organiza en cuatro grandes áreas que se suceden en orden cronológico y que abarcan, aproximadamente, la década entre 1915 y 1925; cuando ambos creadores revolucionaron el arte y la moda, respectivamente.
La primera parte del recorrido muestra la influencia del cubismo en el estilo de Chanel, ya desde sus primeros e innovadores diseños: el lenguaje formal geométrico, la reducción cromática o la poética cubista del collage se traducen en trajes de líneas rectas y angulosas, en su predilección por las masas de color, por el blanco, el negro y el beige, y en la utilización de tejidos humildes.
La segunda parte de la exposición está dedicada a los retratos que Picasso realizó de su primera mujer, la bailarina Olga Khokhlova, gran clienta y amiga de Chanel. Además, se expondrán vestidos de esta primera etapa de Chanel, de los que se conservan muy pocas piezas.
La tercera parte de la muestra se centra en la adaptación que Cocteau realizó de la obra de Sófocles, Antígona, en París en 1922. Un montaje con decorados y máscaras de Picasso y vestuario de Chanel.
El último sector de la exposición muestra el trabajo que tanto Chanel como Picasso realizaron para El tren azul, el ballet producido por Serguéi Diághilev en 1924, con libreto de Cocteau inspirado en el deporte y la moda de baño.
Dos mujeres corriendo por la playa (La carrera), un pequeño gouache que Diághilev descubrió en el taller de Picasso, se convirtió en imagen para el telón de la obra, mientras que Chanel, entusiasta deportista, creó trajes para los bailarines inspirados en modelos deportivos diseñados para ella misma y para sus clientes.
La exposición reúne 65 obras de Picasso y 50 piezas de archivo de Chanel, una ocasión perfecta para bucear en el arte y el estilo del periodo de entreguerras del siglo XX.