Mayo, tiempo de flores y alergias, viene cargado de humor con el collage de Femmella, la artista invitada para ilustrar este mes en el calendario solidario de La Imprenta CG.
Femmella Collages, una combinación irresistible de imágenes y humor
Vanessa Martínez, o Femmella comenzó estudiando Psicología para después pasarse a Bellas Artes. Además de realizar collages o bri-collages, como a ella le gusta llamarlos, también trabaja como comunicadora e ilustradora en la revista cultural Afán de plan.
Su estilo está marcado por el humor, la ironía y la sutileza y sus obras está influenciadas por el trabajo de artistas como Grete Stern o Martha Rosler.
Entrevista a Femmella Collages
¿Cómo se despertó en ti la necesidad o el deseo de ilustrar?
Ilustrar textos o portadas con mis collages nunca fue un objetivo, sino una consecuencia de empezar a mostrar públicamente lo que hacía.
El único fin (si es que tuve uno alguna vez) era el de aprovechar esta divertida técnica como vía de escape. Poder liberar mis pensamientos, aunque después se quedaran guardados en una carpeta. Un revulsivo contra el estrés y la mala leche que me provocan muchas de las cosas que pasan en el mundo. Eso sí, siempre filtrando esas emociones en el tamiz del sarcasmo y la subversión. No lo puedo evitar.
Sin pretenderlo, empezaron a llegarme encargos, especialmente desde el sector musical.
Es innegable que me siento insegura, porque ésta no es mi profesión, pero las intrusas también tenemos nuestro ego.
Como también tengo un sentido de la responsabilidad un poquito exagerado, hace tiempo decidí seguir formándome en esta técnica (en mi caso, collage digital) para ampliar recursos y herramientas.
¿Tienes algún rito especial, alguna manía, cuando te enfrentas a un proyecto creativo?
Ni ritos ni manías, pero sí una fórmula común a todo lo que hago, ya sea la confección de un plan de comunicación (a lo que realmente me dedico, dentro del sector cultural) o de un collage: escuchar atentamente y empaparme bien del proyecto.
Sin perder de vista mi estilo, trato de ser una portavoz fiel. Si me encargan la portada de un disco, por ejemplo, paso horas escuchando en bucle las canciones y dejándome llevar al lugar que quieran llevarme. A veces, sacan mi lado más poético; otras, el más transgresor.
A partir de aquí, inicio la búsqueda y recopilación de imágenes (un proceso que requiere mucho tiempo y paciencia). Después llega la selección y la preparación de materiales. En tercer lugar, empieza el juego: probar, probar, reír, descartar, seguir probando, encontrar, mover, quitar, poner.
¿Qué es lo que más raro que has llegado a realizar?
Raro, creo que nada. Pero sí he aceptado encargos de los que luego me he arrepentido muchísimo. Desde entonces, solamente me embarco en proyectos bonitos con gente empática, respetuosa y generosa.
Adoro trabajar con el músico Abraham Rivas, por ejemplo. Sus canciones me inspiran mucho, y él me da mucha libertad y una confianza ciega para crear. Ya hemos colaborado tres veces y es muy reconfortante. ¡Atención, porque en breve habrá sorpresas!
¿Quiénes son tus referentes o influencias en literatura, música, etc.?
Supongo que todo nos influye, ya sean libros, canciones o una noticia del periódico; pero para elaborar collages me gusta estudiar las técnicas de algunas/os collagistas.
De Jindřich Štyrský a Rosa De Salvo, pasando por Terry Gilliam, Eugenia Loli, Isabel Chiara, Julia Geiser, Beth Hoeckel, Sammy Slabbinck, Grete Stern, Hannah Höch, Martha Rosler…
¿Con qué artista o creador/a te correrías una juerga?
Con Fina Miralles, Esther Ferrer, Mierle Laderman Ukeles, La Ribot, Valie Export, Poison Ivy, Lola Flores, Kim Deal, Teresa de Cepeda y Ahumada… Todas juntas.
¿Nos recomiendas una peli y un libro?
Vale. Una película: Alice, de Jan Švankmajer (1988). Un libro: El Tutú, de Princesa Safo (1891).
¿Crees que el trabajo de ilustrador/a está suficientemente reconocido?
Creo que las profesiones artísticas y creativas, en general, y hablo ahora como comunicadora cultural y no como “artista”, nunca acaban de estar suficientemente reconocidas.
Hay quien tiene suerte y accede al star system, pero en este sector predomina la precariedad. Si, además, eres autónoma… Apaga y vámonos.
¿Qué harías para mejorar la situación?
Cambiar las políticas culturales y mejorar las condiciones de los profesionales autónomos.
Que bajaran los alquileres tampoco estaría nada mal, dicho sea de paso. Supongo que, teniendo unos gestores empáticos y sensibles al arte, ya ganaríamos mucho.
No todo es mercado. La vida real (y la verdadera cultura) está fuera de los despachos.
¿Qué consejo te hubiera gustado recibir cuando empezaste?
Estudia Fontanería, insensata.
Muchas gracias a Femmella por colaborar con nosotros en el calendario solidario de 2023, cuyos beneficios están destinados a la Fundación Ronald McDonald de València.
Os recordamos que podéis comprarlo en nuestra web o en la Librería Bangarang de València.