Octubre se despliega en nuestro calendario con el collage de Guillermo Berman, una manera perfecta de adentrarnos en otoño.
Guillermo Berman, de Murcia a Venecia por el arte
Guillermo Berman comenzó su formación en Bellas Artes en la Universidad de Murcia, su ciudad natal. Su deseo de ampliar experiencias, conocer otros lugares y nuevas técnicas artísticas le llevó a continuar su licenciatura en diferentes ciudades, gracias a las becas: Palermo, Venecia y Salamanca son parte de su formación.
En Venecia, trabaja como asistente de dos profesores de grabado de la Accademia di Belle Arti y también del gran artista veneciano Vincenzo Eulisse.
Aunque ya tenía casi ochenta años, el vital e irreverente Eulisse supone una gran influencia en Guillermo Berman. Su modo de combinar pintura y escultura, utilizando objetos antiguos, hierros oxidados, maderas astilladas, pintura acrílica y un sinfín de materiales que ensamblaba en piezas escultóricas son claves en el modo de trabajar de Berman.
En Salamanca, en 2011, Guillermo Berman finaliza la carrera de Bellas Artes, pero continúa formándose con el curso de adaptación pedagógica, donde comienza a interesarse por la ilustración.
En 2014, se traslada a Valencia, donde cursa el Máster en Diseño e Ilustración de la UPV y participa en varios talleres artísticos, al tiempo que desarrolla proyectos en los que combina imágenes planas con telas y objetos.
Cuando Julio Antonio Blasco, uno de sus referentes en el campo de la ilustración, imparte un taller de collage, descubre la técnica que aúna todos sus interesas artísticos.
Aquel taller supone un antes y un después en el trabajo de Guillermo Berman, que constata el potencial expresivo del collage.
Comienza entonces a participar en diferentes proyectos y eventos relacionados con esta técnica y a formar parte de la Sociedad de Collage de Valencia, junto a destacados artistas, ilustradores y diseñadores.
En 2015, desarrolla un proyecto de larga duración, “Los Días Contados por Guillermo Berman”, en el que publica en sus redes sociales un collage cada día, acompañado de un microrrelato.
Gracias a este proyecto, comienza a participar activamente en mercados y ferias de arte e ilustración, así como en exposiciones individuales y colectivas. Además, imparte talleres de collage e ilustración.
En 2017, compagina la preparación de oposiciones con los talleres, las exposiciones (incluida su primera exposición internacional) y los encargos de ilustraciones publicitarias y editoriales. Funda la Sociedad de Collage de Cartagena junto a grandes artistas de esta ciudad, con los que desarrolla una serie de intervenciones artísticas, exposiciones y talleres creativos.
En 2020, tras aprobar las oposiciones, se traslada a Madrid, donde trabaja como mediador cultural en un museo. Allí continúa formándose y desarrollando nuevos proyectos artísticos, iniciándose en nuevas técnicas como el bordado o los volúmenes.
Entrevista al artista e ilustrador Guillermo Berman.
¿Cómo se despertó en ti la necesidad o el deseo de ilustrar? ¿Cuál es tu primer recuerdo con un lápiz en la mano?
Siempre me ha gustado inventar historias disparatadas, crear nuevos personajes en mi mente, evadirme de la realidad. Para ello, entre otros recursos, me servía del lápiz para dibujar todo aquello que se me pasaba por la cabeza. De hecho, el primer oficio al que me quise dedicar de mayor era el de dibujante, además de cantante y bailarín. Y en la actualidad estoy llevando a cabo al menos dos de tres.
¿Tienes algún rito especial, alguna manía, cuando te enfrentas a un proyecto creativo?
A priori nada del otro mundo. Me gusta investigar alrededor de los proyectos que desarrollo, como la mayoría de las personas que se dedican a este menester. Y, eso sí, ponerme la música adecuada. Siempre trabajo con música.
¿Qué es lo que más raro que has llegado a dibujar-realizar?
No sé si raro, pero lo más minúsculo que he hecho ha sido un microfanzine de menos de 5 cm. de altura que va dentro de una cajita pequeña de cerillas, con juego de pegatinas incluido. Y raro de verdad fue trabajar de catador de alimentos o vestido de dinosaurio hinchable en un desfile de carnaval.
¿Quiénes son tus referentes o influencias en literatura, música, etc.?
Literatura, música y cine son esenciales en mi vida y me han servido (y sirven) como fuente de inspiración en cada uno de los proyectos que he desarrollado. Especialmente la música. Cada etapa de mi vida tiene una banda sonora bien definida. Y aunque me guste principalmente la música ska, punk o rocksteady, tengo un amplio espectro musical: jazz, blues, country, rockabilly, música balcánica, sefardí… Y, por supuesto, la música clásica.
Por poner ejemplos concretos, en el ámbito literario me gusta sobre todo quien cuenta historias con final inesperado y un toque algo macabro o de humor negro. Me impactó mucho en su día Ajuar funerario de Fernando Iwasaki. Y aunque sea principalmente ilustrador, las historias de Edward Gorey me fascinan.
En cuanto a la música, voy a poner un variado: Skalariak, Parálisis Permanente, Alton Ellis, Kitty, Daisy and Lewis, Dusminguet, Shannon & the Clams, Fabrizio de André, Víctor Jara, Etta James…
¿Con qué artista o creador te correrías una juerga?
Se me ocurren varios, pero por su sentido del humor yo creo que con la ilustradora Irene Márquez. Y también me habría encantado conocer a Forges.
¿Nos recomiendas una peli y un libro?
Para no complicarme, voy a ceñirme a lo que he estado viendo y leyendo este verano.
Peli: La mujer de la montaña, de Benedikt Erlingsson.
Libro: Cosas que hacen BUM, de Kiko Amat.
¿Crees que el trabajo de ilustrador está suficientemente reconocido?
Cada vez hay una mayor consideración a la hora de contratar a profesionales para realizar carteles, ilustrar productos, diseñar packaging, crear campañas publicitarias… No obstante, ser ilustrador autónomo es una labor ardua e inestable. Es por eso que decidí opositar: ahora compagino la ilustración con la mediación cultural en un museo y de este modo también enriquezco una profesión con la otra.
¿Qué harías para mejorar la situación?
Principalmente modificar la cuota de autónomo, que es desmesurada. Y perseguir a los que pagan poco o nada a los ilustradores a cambio de “visibilidad”.
¿Qué consejo te hubiera gustado recibir cuando empezaste?
Siguiendo el hilo de la pregunta anterior, valorar mi trabajo y no venderme barato ni gratis, además de dejar las cosas bien claritas con los clientes desde el primer momento.
En La Imprenta CG estamos muy agradecidos a Guillermo Berman por colaborar con nosotros en nuestro proyecto de calendario solidario. Os recordamos que los beneficios están destinados íntegramente a la Fundación Ronald McDonald de València.