Si alguna vez has tenido que imprimir algo un poco especial con la impresora de casa o el trabajo, seguro que has tenido que romper más de un folio porque no ha salido como tú querías: desordenado, con las caras unas para arriba y otras para abajo, etc. Sin embargo, los profesionales disponen de técnicas precisas para que esos errores no ocurran y lograr la máxima eficiencia en la impresión. Por eso hoy os explicamos dos técnicas fundamentales a la hora de imprimir libros: la imposición y el plegado.
Cómo se hace la imposición
La imposición es el modo de distribuir las páginas de un libro u otra publicación impresa en la hoja de papel de la máquina de impresión. Por ejemplo: Si tengo una máquina de imprimir de tamaño A3 (420×297 mm) y tengo que imprimir un flyer tamaño A5 (148×210 mm) podré imprimir 4 ejemplares del flyer en una hoja.
Para realizar la imposición es necesario conocer el tamaño de la hoja impresa y el sistema de impresión, ya que dependiendo de estos factores, se utilizarán distintas imposiciones. Se puede empezar por la imposición de 2 páginas hasta la de 32 páginas. Los tamaños de impresión en las máquinas más comunes son: 32×45 cm, 50 x 70 cm y 70 x100 cm, aunque con el avance de la tecnología digital esto está cambiando.
Cuando se van a imponer flyers, tarjetas de visita, o cualquier impreso que vaya cortado, la imposición es muy sencilla, simplemente hay que buscar la manera de aprovechar al máximo el tamaño de hoja dejando entre ellos espacio para el corte de los elementos y cuñas de control.
Cuando se imponen libros o revistas, las páginas se distribuyen en la hoja de impresión de una forma concreta (para luego poder plegarlos y que las páginas queden correlativas), según un trazado creado previamente y en el que se incorporan las marcas de plegado, casación y corte; así como cuñas de control del color e información adicional. A esta forma se le denomina pliego de máquina o forma impresora.
La palabra pliego define la forma en que se trata la hoja después de su impresión en el departamento de encuadernación, la hoja se pliega con varias dobleces formando un cuadernillo. Una vez creado, comienza el siguiente proceso: la encuadernación cosida o fresada del libro.
En la variante de 32 páginas, lo normal es dividir la hoja de máquina en dos cuadernillos, con lo que se consiguen dos pliegos por tirada u hoja impresa. De este modo se evita el excesivo deslizamiento del cuadernillo que se produce en el caso de plegar las 32 páginas en un único cuadernillo.
En el siguiente esquema puedes ver todos los elementos que componen la imposición de un pliego.
¿Quién tiene que realizar la imposición del libro?
La imposición de un libro o revista la tiene que hacer siempre la imprenta. Es un proceso complejo, implica conocer el tipo de máquina que se va a utilizar para imprimir (tamaño impresor, pinzas), el tamaño del papel y las máquinas de encuadernación que se van a utilizar, pues no todas necesitan las mismas pestañas o tienen las mismas estaciones de alzado, etc.
Si eres un diseñador y la imprenta te ha dicho que realices tu la imposición huye y busca una imprenta más profesional.
¿Qué es el deslizamiento o desmentido en imprenta?
En las imprentas llamamos deslizamiento o desmentido (también decalaje o creeping) al efecto que ocurre al plegar una hoja varias veces sobre si misma, las páginas interiores se van desplazando o deslizando hacia afuera. Posteriormente durante el proceso de encuadernación se cortarán para igualarlas, pero esas páginas interiores quedarán un poco más pequeñas que las externas.
Cuantas más páginas tiene un pliego, más deslizamiento se produce, por ello acostumbramos a dividir los pliegos de 32 páginas en 2 pliegos de 16 páginas. También recomendamos no acercar elementos como textos o números de página a menos de 3 o 4 mm del borde, para evitar que por efecto del deslizamiento se puedan cortar.
El deslizamiento es especialmente peligroso en publicaciones grapadas de varios pliegos, donde hay que acaballar o embuchar varios pliegos entre si (introducir un pliego dentro de otro), en este caso las hojas del centro pueden llegar a tener hasta 3 o 4 mm menos que las exteriores.
Actualmente los modernos sistemas de imposición informatizada permiten deformar la página para compensar el deslizamiento, pero es una solución controvertida, hay clientes que prefieren que ocurra el deslizamiento antes que deformar la página. Nosotros por norma general no compensamos el deslizamiento en pliegos de 16 páginas y solo activamos la compensación en revistas grapadas de 64 o más páginas.
El plegado
El plegado se realiza por medio de máquinas plegadoras que pueden ser de bolsa o de cuchilla, siguiendo un orden establecido de plegado. Normalmente se utilizan distintos módulos de plegado en serie y, en cada uno de ellos, el papel es plegado en una dirección distinta. Al finalizar este proceso, se obtiene el cuadernillo totalmente plegado y disponible para el siguiente paso a la hora de imprimir un libro.
El orden de plegado más habitual es el siguiente: viendo el pliego en horizontal, se pliega sobre sí mismo por su eje central vertical. El siguiente pliegue se realiza en su eje central horizontal, y por último se pliega de nuevo por su eje vertical.
Una vez realizado el plegado quedaría como en la siguiente ilustración, añadiendo múltiples pliegos obtendremos un libro; en cada pliego se acostumbra a poner en el lomo una marca o topo que ayuda a ver a simple vista si hay algún error en el alzado de los pliegos.
Glosario de términos de imposición
Página: Cada una de las dos caras de la hoja de un libro. En los programas de imposición la página define el tamaño del libro e incluye todos los elementos a imprimir.
Pliego: Hoja de papel en la que se imprimen varias hojas de un libro. A menudo se utiliza el término pliego tanto para definir la hoja que sale de la máquina de imprimir, como para definir a la hoja una vez plegada, aunque es más correcto usar el término cuadernillo.
Cuadernillo: El resultado de plegar una hoja varias veces sobre sí misma de una manera preestablecida. La acumulación de varios cuadernillos nos dará como resultado un libro. En algunos talleres se les denomina también pliegos.
Calles: Espacios libres que se dejan entre las páginas de una imposición para poder doblar y cortar el trabajo. Las calles desaparecerán una vez cortado el trabajo y es donde se ubican las marcas de corte y de plegado
Marcas de corte: Pequeñas líneas situadas en las esquinas de la página que indican por donde se ha de cortar el trabajo en guillotina para dejarlo a su tamaño final. Se colocan 3 mm fuera de la página para que al cortar no aparezcan en el libro.
Marcas de plegado: Líneas que indican por donde hay que doblar la hoja para obtener un cuadernillo. Se colocan fuera de la página para que desaparezcan al cortar.
Marcas de alzado: Se utilizan en los libros y consisten en pequeños rectángulos negros que se colocan en el lomo de los cuadernillos de forma sucesiva y escalonada para poder ver a simple vista si hemos cometido algún error en el alzado.
Marcas o cruces de registro: Marcas en forma de cruces y círculos que se colocan en todas las planchas y que sirven para alinear (casar o registrar) todas las tintas entre si (cian, magenta, amarillo y negro). Cuando un trabajo está perfectamente registrado veremos todas las marcas superpuestas y el resultado será una marca negra, si algún color se desplaza se verá a simple vista una marca cian, magenta o amarilla.
Medianil o pliegue: En imposición, zona por la que se dobla el papel.
Tiras de control o ajuste de densidad: Son unas tiras que contienen parches de colores, combinando colores básicos, superposiciones de colores, matices, etc. Esta barra se mide con densitómetros o espectrofotómetros para poder comprobar que la densidad de tinta es la correcta, para ayudar en el ajuste inicial y también para comprobar que la colorimetría se mantiene durante toda la tirada. También llamadas cuñas de color.
Alzado: Proceso por el cual se colocan los cuadernillos de una publicación de forma ordenada. Los cuadernillos se pueden alzar uno a continuación de otro para obtener un libro cosido, o se pueden embuchar (meter un pliego dentro de otro, a caballete) para hacer una publicación grapada.
El método para imponer un libro
Hoy en día, con la tecnología digital y las filmadoras CTP de filmación directa a plancha, las imposiciones y trazados se realizan con aplicaciones específicas para ordenador. Para realizar los montajes, se utilizan los archivos digitales en formato PDF directamente sobre el montaje de las hojas de máquina.
Hay muchos y variados software especializados en imposición: Xmf, Prinec, Press, Imposition Studio, etc., la utilización de uno u otro depende de las preferencias de la imprenta, pero todos ellos funcionan correctamente. Olvidado ha quedado el montaje manual con fotolitos sobre una hoja plástica transparente (astralón de montaje), los métodos actuales facilitan mucho el trabajo y abaratan el proceso, haciendo más accesible la posibilidad de imprimir tu libro a un precio accesible.