Ya sea un catálogo lleno de fotos, una tesis doctoral, una agenda personalizada, un fotolibro o una novela; a la hora de imprimir hay varios errores muy comunes que debemos evitar para obtener el mejor resultado posible.
Errores al imprimir más comunes
No comprobar las medidas
En nuestra imprenta online tienes multitud de medidas para elegir la que más se adapta a tu proyecto.
A la hora de realizar la maquetación de tu publicación, ten en cuenta esas medidas para que no tengas que adaptarlas más tarde y realizar el doble de trabajo.
Problemas con márgenes y sangrados
Si no quieres que algo se corte, ponle un buen margen. Y si quieres que algo no tenga un espacio en blanco alrededor, sino que continúe hasta el final de la página, dale sangre.
Aquí tienes más información para no perderte en el bosque de los espacios en la maquetación:
Márgenes de libros. La distribución de los blancos en un libro impreso.
Los sangrados en los trabajos de imprenta.
Sin faltas, por favor
Nada da peor imagen que un texto -ya sea comercial o literario- con faltas de ortografía. Revisa, revisa y revisa el texto para que no se te pase ningún error gramitical.
No te fíes del corrector del Word y, si tienes alguna duda, consulta en páginas como Fundeu o el diccionario online de la RAE.
Textos muy pequeños o ilegibles
Un hecho aceptado universalmente es que imprimir un texto por debajo de 6 puntos es complicado. Convertirá tu publicación en un bonito montón de papel ilegible.
Lo mismo ocurre con las tipografías elegidas. A no ser que busques precisamente ese efecto estético, lo mejor es recurrir a tipografías que permitan la lectura de un modo fácil y que no canse la vista del lector.
El interlineado (espacio entre líneas) también es importante a la hora de maquetar una publicación, tenlo en cuenta y elige el tamaño justo para la lectura sea más cómoda.
Aquí tienes una guía que te ayudará a elegir la letra de tu proyecto: Elegir tipo de letra, cuerpo e interlineado para un libro.
No incrustar las fuentes
¿Incrus… qué? Pasas horas eligiendo la mejor fuente en Dafont, días decidiéndote por la mejor combinación de tipos y cuando lo envías a imprenta… ¡Horror, fuente no encontrada!
Cuando se utilizan fuentes, puede ocurrir que el ordenador de la imprenta de tu elección no tenga esa fuente concreta y el programa de diseño la sustituirá por otra por defecto, cambiando la apariencia de tu proyecto.
Por eso es importante que se incrusten las fuentes o que se conviertan en contornos o trazados.
RGB… ¡No, gracias!
Cada vez que mandas a imprenta un archivo en modo RGB, un impresor se corta con papel y muere un unicornio.
El modo RGB está pensado para las pantallas; para enviar a imprenta, siempre, siempre hazlo en CMYK.
En esta guía te explicamos todo sobre el color en impresión: Las transparencias, los colores directos y RGB.
Píxeles, para qué os quiero: cuidado con la resolución.
Que una imagen se vea bien en pantalla no significa que se imprima bien. Si no quieres que tu publicación tenga fotos borrosas o pixeladas, utiliza siempre imágenes con 300dpi de resolución.
Sólo si se trata de impresiones muy grandes como murales, lonas o carteles gigantes puedes bajar la resolución a 150 ó 120dpi.
Con este tutorial, evitarás los errores a la hora de elegir la resolución de las imágenes a la hora de imprimir: Cómo definir la resolución de una imagen.
No confiar en profesionales
Si todo esto te da dolor de cabeza y no quieres ni oír hablar de sangres y fuentes, lo mejor es que confíes en profesionales.
En La Imprenta CG ofrecemos un completo servicio de edición a nuestros clientes, para que no te tengas que preocupar de nada y que el resultado final sea perfecto, tanto en fondo como en forma.