Esta semana se cumplen 25 años de los Juegos Olímpicos de Barcelona, una excusa perfecta para hablar del diseño rompedor de su mascota, Cobi, y de su creador: Javier Mariscal.
Cobi: una mascota de diseño rompedor
Parece que fue ayer, pero NO, ya han pasado 25 años de Barcelona 92;unos Juegos en los España se sacudió complejos y se propuso dar al mundo una imagen renovada y atractiva. Cobi, la mascota de los Juegos, fue un claro exponente de ese anhelo de modernidad y frescura.
El nacimiento de Cobi se originó en el concurso con jurado profesional del Comité Organizador de las Olimpiadas de Barcelona (COOB) con el fin de elegir una mascota olímpica. Javier Mariscal fue el ganador del concurso oficial, con una mascota rompedora, que huía de la imagen más “Disney” de anteriores propuestas.
Para crear a Cobi, Mariscal partió de un garabato de un perro, realizado con su muy reconocible trazo, e inspirado en un pastor catalán de aspecto cubista. Cobi era un perro antropomórfico, de orejas puntiagudas y con una característica nariz ladeada con una bola negra en la punta.
Del odio al amor, conociendo a Cobi
Hoy en día el diseño está presente en casi todos los ámbitos de la vida. Los estímulos visuales son constantes y el “ojo” está acostumbrado a diferentes estéticas y propuestas gráficas. Sin embargo, en 1992, Cobi supuso todo un terremoto. “¿Un perro aplastado?” “¿Por qué no un adorable cachorrillo convencional?”.
La acogida de la mascota de Mariscal fue fría en un principio y causó encendidos debates. Sin embargo, el diseño caló y el público comenzó a apreciarlo; de hecho hasta protagonizó una serie de dibujos animados (The Cobi Troupe).
Al finalizar las Olimpiadas, la aceptación entre el público español de Cobi fue del 81% y, con el paso de los años se ha convertido en una de las mascotas más queridas y recordadas de la historia de los Juegos.
Javier Mariscal, un creador más allá de Barcelona 92
Javier Mariscal es uno de los pocos nombres de diseñadores españoles que todo el mundo conoce. Barcelona 92 le dio notoriedad en todas las capas sociales, pero su trabajo no empezó ni terminó con Cobi.
Mariscal nació en Valencia en 1950, aunque desde los 20 años vive y trabaja en Barcelona. Aunque comenzó su formación en diseño en la escuela ELISAVA (Escuela Universitaria de Diseño e Ingeniería de Barcelona), Javier Mariscal también formó parte del boom del cómic adulto underground de finales de los 70 y 80 en España (Víbora, Star, etc.).
De hecho, en sus inicios Javier Mariscal combina su trabajo en como historietista (con la serie Los garriris) con la ilustración, la escultura, el diseño gráfico y el interiorismo. Precisamente, el carácter polifacético de Mariscal es una de sus señas de identidad: muebles, ropa, películas de animación, identidad corporativa, logos… Nada se escapa al talento multidisciplinar del creador valenciano, que continúa al pie del cañón al frente de su Estudio Mariscal, abierto en 1989.
Imagen de la película de animación Chico y Rita.
Entre sus proyectos gráficos, destacan la identidad corporativa de Onda Cero, El Zoo de Barcelona o la Universitat de València. Como artista polivalente, Mariscal también ha explorado otros ámbitos de la creación como la película de animación «Chico y Rita» o el diseño del libro “1080 recetas de cocina”, de Simone Ortega, editado por Phaidon, con más de cuatrocientas ilustraciones.
Y lo que queda… ¿Con qué nos sorprenderá Mariscal la próxima vez?
