El IVAM acoge hasta el 24 de abril el proyecto de Ricardo Ruíz El llibret de falla: una oportunitat cultural, que tiene como objetivo dar a conocer el rico patrimonio cultural que suponen estas pequeñas publicaciones para la sociedad valenciana.
Para Nuria Enguita, directora del museo, se trata de “un elemento fundamental que está presente desde los orígenes de la fiesta, puesto que siempre ha habido un libro que hacía «l’explicació de la falla». Al mismo tiempo, se pretende reivindicar su valor como documento que deja constancia escrita de la historia de la ciudad de València a través de sus fiestas más populares».
En el IVAM se pueden ver más de cien llibrets, entre ellos algunos ejemplares históricos fundamentales en la evolución de estas publicaciones. También se presta especial atención a los cambios producidos en los últimos años, cuando el diseño gráfico más vanguardista ha entrado de lleno en el mundo fallero.
El llibret de falla: una oportunitat cultural incluye el llibret de 1855 que está considerado el primero de la historia, según el historiador Lluis Tramoyeres.
También se puede consultar el mítico llibret de la falla King Kong, que destaca por su calidad formal y de contenidos, y otros que cuentan con textos de Joan Fuster, Josep Renau o Salvador Dalí.
Nuria Enguita, directora IVAM, y Ricardo Ruíz director proyecto.
Los llibrets de falla: una evolución imparable
El proyecto expositivo se centra en mostrar la evolución de los llibrets desde sus inicios en el siglo XIX hasta la actualidad.
El director del proyecto, Ricardo Ruíz, cree que es importante potenciar la existencia del llibret de falla como una oportunidad cultural más allá del mundo fallero.
Por eso, además de una apuesta por parte de las instituciones públicas, cree que es necesario “concienciar a los delegados de publicaciones de las comisiones, convertidos en editores y gestores culturales, que tienen la responsabilidad de invitar a participar a gente que no forma parte del colectivo fallero, cuya voz es realmente necesaria».
Para Ruíz, los llibrets tienen el potencial para convertirse en «una oportunidad cultural, una plataforma genuinamente local de expresión libre, participativa, que debe dar cabida al talento del mundo cultural valenciano, en forma de reflexiones escritas, poesías, ilustraciones, fotografías; condensadas en un formato editorial valenciano cuya naturaleza es interseccional y no endogámica, que nos empuja a compartir formas de ver y conocimiento desdibujando estratos culturales”.
Para esta muestra tan peculiar el IVAM ha utilizado un mueble-expositor en forma de espiral que permite hacer un recorrido cronológico por las publicaciones, con espacios de consulta para hojear los ejemplares. «El vestíbulo del IVAM se ha transformado en una gran biblioteca participativa y efímera», afirma Nuria Enguita.
Entre los llibrets más actuales, podemos disfrutar de algunos ejemplares que cuentan con la colaboración de expertos como Gil-Manuel Hernández, director del Museu Faller de València, o Iván Esbrí, responsable del Centro de Documentación de la Fiesta de las Fallas.
También se pueden consultar publicaciones con versos de Alba Fruixá, diseños gráficos de Iban Ramón o ensayos de Román de la Calle; así como llibrets que no han sido elaborados por las comisiones falleras, sino por colectivos como las Fallas Populares y Combativas o la asociación Festa de les Lletres Falleres.
Nuestro compañero Armand Llàcer participó en el debate/presentación del proyecto.
En La Imprenta CG somos expertos en la impresión de llibrets de falla, por eso nuestro compañero Armand Llàcer participó en la mesa redonda que se celebró en el museo para debatir la importancia de los llibrets como “falla que no se quema” y, al ser una creación tan transversal, documentos importantes para conocer la época en la que se crearon.
En este sentido, los llibrets son los testigos imperecederos de una fiesta efímera como las Fallas, en la que todo termina y se quema hasta el año siguiente.
Las imprentas valencianas siempre han tenido una implicación histórica muy importante en su creación y para nosotros es un orgullo ser los herederos de esa rica tradición.
