Will Eisner está considerado como el padre de la novela gráfica. Creador entre otros del personaje The Spirit, popularizó el cómic más allá del público infantil y juvenil.
Will Eisner, un historietista de cuna
William Erwin Eisner nació en Nueva York, en 1917. Su padre, de origen ucraniano, se dedicaba a pintar telones de fondo para el vodevil y el teatro judío. Su madre, de ascendencia rumana, nació en el barco rumbo a Estados Unidos y la temprana muerte de sus padres hizo que no pudiera tener estudios.
La familia de Will Eisner era muy pobre y tuvo que mudarse en repetidas ocasiones, sin salir de Nueva York. Para disgusto de su madre, Will heredó el gusanillo por el arte de su padre, que le animaba y compraba materiales de dibujo en cuanto tenía ocasión.
Con 13 años, Will Eisner comenzó a trabajar como vendedor de periódicos, al tiempo que seguía estudiando en la escuela secundaria DeWitt Clinton.
Allí comenzó a dibujar para el periódico escolar, la revista literaria y el anuario. Además, siguiendo el camino de su padre, realizó la escenografía de diferentes obras de la escuela.
Tras graduarse, estudió con el artista canadiense George Brant Bridgman durante un año en la Art Students League de Nueva York. Con los contactos que hizo allí, consiguió un trabajo como escritor publicitario y caricaturista para el periódico New York American. Durante esa época, Eisner también dibujó para diferentes publicaciones “pulp”, como Western Sheriffs y Outlaws.
Con 19 años, su amigo del instituto Bob Kane (considerado el creador de Batman), animó a Eisner a que vendiera dibujos para una nueva publicación: Wow, What A Magazine!, que no solo incluía reimpresiones de tiras cómicas, sino que contaba con material nuevo hecho ex profeso para la revista.
En Wow publicó la serie de aventuras Captain Scott Dalton; la historieta de piratas The Flame y la historia de espionaje Harry Karry.
La aventura de Wow duró cuatro números. Tras el cierre, Will Eisner y su compañero Jerry Iger comenzaron a trabajar juntos, produciendo y vendiendo material original de cómics, anticipando un aumento de la demanda de este tipo de material gráfico.
Su asociación fue todo un éxito comercial y pronto tuvieron a su cargo a un grupo estable de creadores de cómics (entre ellos, Bob Kane y Jack Kirby) que proporcionaban material a Fox Comics, Fiction House, Quality Comics; entre otros.
Hawks of the Seas fue la creación más importante de Will Eisner durante esta etapa.
La creación de The Spirit
A finales de 1939, Will Eisner recibió una oferta difícil de rechazar. Varios periódicos dominicales querían su trozo del pastel de las nuevas publicaciones de cómic, que se habían convertido en una competencia a tener en cuenta.
Aunque Eisner & Iger iba viento en popa, este nuevo encargo era demasiado grande para compaginarlo con el estudio.
Will Eisner aceptó hacer el cómic del dominical. Eso sí, no sin antes asegurarse un buen trato: sería socio de la “Sección de cómics”, produciría otras dos revistas y, lo más importante, los derechos de autor serían suyos si sus caminos se separaban (algo que ya había conseguido en su estudio).
Tras vender su parte del estudio, Will Eisner se fue a los periódicos dominicales, donde creó The Spirit. Esa nueva plataforma para sus creaciones le dio acceso a una audiencia adulta: «Yo quería escribir cosas mejores que los superhéroes. Los cómics eran un gueto. Vendí mi parte de la empresa a mi socio y luego comencé The Spirit. Querían un personaje heroico, un personaje disfrazado. Me preguntaron si tendría un disfraz. Y le puse una máscara y dije: ‘¡Sí, tiene un disfraz!'», afirmó el autor en 1997.
The Spirit nació en 1940 y continuó hasta 1952 luchando contra el crimen. La historia de Danny Colt, un detective privado sin superpoderes, se publicaba en un suplemento dominical de 16 páginas, que llegó a distribuirse en 20 periódicos con una circulación combinada de hasta cinco millones de copias.
La II Guerra Mundial y los cómics bélicos
Will Eisner fue reclutado por el ejército de los EE.UU. a principios de 1942. Fue destinado al periódico del campamento Aberdeen Proving Ground. Durante la guerra, ayudó a realizar publicaciones y animaciones para la formación de los soldados. Esa labor de formación se prolongó más allá de la guerra, hasta los años 70 del siglo pasado.
Durante la guerra, The Spirit siguió publicándose gracias al trabajo de otros dibujantes, que Eisner tenía trabajando en su estudio bajo su supervisión. Algunos publicaron con sus nombres y otros ejercieron de “negros” de Eisner.
Tras la guerra, Eisner volvió a su estudio y creó la mayor parte de las historias de The Spirit, con las que consolidó su reputación y fama.
The Spirit dejó de publicarse en 1952, aunque ya convertido en un clásico fue reimpreso por varios editores durante las décadas de 1960 y 1970.
La novela gráfica
A finales de la década de 1970, Will Eisner comenzó a centrarse en formas narrativas más largas e historias más personales. A Contract with God and Other Tenement Stories es un ejemplo temprano de novela gráfica estadounidense, que combina historias cortas vinculadas temáticamente en un solo volumen encuadernado en cuadrados.
Eisner continuó con una serie de novelas gráficas que cuentan la historia de las comunidades de inmigrantes de Nueva York, en particular los judíos, incluyendo The Building, A Life Force, Dropsie Avenue y To the Heart of the Storm.
Continuó produciendo nuevos libros durante los setenta y los ochenta, a un ritmo promedio de casi uno al año. Algunos de sus últimos trabajos fueron adaptaciones de novelas y mitos, incluido el clásico de Herman Melville, Moby Dick.
En 2002, a la edad de 85 años, publicó Sundiata, basada en las historias en parte históricas y en parte míticas de un rey de África occidental, «El león de Malí».
Su última novela gráfica, The Plot: The Secret Story of The Protocols of the Elders of Zion, es un relato que condena el antisemitismo y lo completó poco antes de su muerte. Fue publicado en 2005.
Además de su prolífica carrera como historietista, Will Eisner dedicó su tiempo a la docencia. Enseñó en la Escuela de Artes Visuales de la ciudad de Nueva York, donde publicó Will Eisner’s Gallery, una colección de trabajos de sus alumnos y escribió dos libros basados
Will Eisner es reconocido como uno de los historietistas más destacados de la Historia del Cómic, de hecho, los galardones más importantes de la industria del cómic llevan su nombre: Premios Eisner. Qué mejor honor que ese.